Una ampliación de alto nivel
Una obra de gran complejidad técnica y con plazos de ejecución cortos, que exige la movilización de grandes medios, así como de muchas de las competencias del grupo SADE.
El Sindicado Mixto de Saneamiento de Valenciennes (SMAV) ha encargado a SADE la ampliación de su red de alcantarillado y su posterior conexión a dos conjuntos de edificios.
Este proyecto ha sido el punto final de una importante reestructuración de la red de saneamiento de la ciudad, que busca liberar el curso de agua conocido como La Balhaut del vertido de aguas residuales y que tiene como doble objetivo redirigir el vertido de aguas residuales hacia Escaut y aliviar la carga de la planta depuradora que hasta el momento recibía la totalidad de sus aguas.
2 edificios de viviendas, 1 de ellos complejo
Los edificios de viviendas “Rubens” y “Elisabeth” aún vierten sus aguas residuales en un tramo del río, a través de una obra de drenaje subterránea. La operación adjudicada a SADE consiste en redirigir estas aguas hacia dos extensiones de la red de alcantarillado mediante 2 estaciones elevadoras. En el caso del edificio “Elisabeth”, se llevará a cabo una ejecución clásica, no así en el edificio “Rubens”.
¡Menudo plan!
Para redirigir las aguas residuales del edificio Rubens, será necesario:
- extender la red de alcantarillado, durante más de 100 m y a una profundidad media de 1,30 m por una tubería de polipropileno (PP) de ∅160, con la creación de 3 pozos de registro de PP (∅1000);
- crear un pozo de registro de hormigón de 7 m de profundidad, apoyándose en el generador superior del drenaje del curso de agua;
- instalar en voladizo, en el drenaje de ∅ 1400, 2 segmentos de tubería de PP ∅ 160 para incluir las 3 acometidas donde convergen las aguas residuales de las 86 viviendas;
- conectar estos segmentos a una estación elevadora de PRFV de 10 m de alto y ∅ 2000, previamente instalada cerca del drenaje y su nuevo pozo de registro.
Una estación elevadora XXL y sinérgica
Para poder bajar y luego asegurar la estación elevadora sobre una solera de hormigón y crear un pozo de registro de estas características sobre la obra de drenaje, fue necesario hacer una excavación segura y a medida. Así, se excavaron casi 250 m3 de tierra a una profundidad de 10,5 m con una excavadora de largo alcance en un área de 6×4 m, asegurada por 112 micropilotes de 18 m de profundidad (∅ 300) y 3 cinturones de HEB. Esta obra puede calificarse de sinérgica, pues en ella han convergido varias fuerzas: nuestra filial PERRIER perforó los micropilotes y estudió los HEB; SADE Ingénierie estudió la solera y los planos de ejecución, mientras que nuestras filiales SET y CIEMA se encargaron de equipar la estación (2 bombas en 1+1) y TERRATECH negoció el aprovisionamiento.
Un corto plazo
Iniciada a principios de julio, esta parte de la obra debe estar terminada a más tardar el 31 de agosto. De lo contrario, nos exponemos a importantes penalizaciones. Para respetar este compromiso, el Grupo SADE ha sido capaz de movilizar los medios y las competencias adecuadas, e incluso algunos miembros han aceptado aplazar sus vacaciones para «formar parte de la aventura». ¡Gracias a todos ellos!